La «reciprocidad generalizada», más que una cadena de favores
Por David Bembibre
¿Recordáis aquella película llamada «Cadena de Favores«?
En esta película protagonizada por un joven Haley Joel Osment (muy famoso por la película «El Sexto Sentido») se muestra un proyecto de un estudiante de Ciencias Sociales que intenta que el mundo sea un lugar mejor con algo muy sencillo: Haciendo un favor desinteresado a una persona y que esta a su vez le haga otro favor a otra persona, y así sucesivamente.
Una nueva investigación sobre este tipo de generosidad llamada «reciprocidad generalizada» refleja que podría ser posible que las empresas lo fomenten entre sus empleados.
Los investigadores Wayne E. Baker y Nathaniel Bulkley se centran en dos tipos comunes de reciprocidad generalizada: La cadena de favores y la reputación gratificante.
En la cadena de favores la motivación de las personas esta impulsada por el «afecto positivo: tu me ayudas y yo me siento agradecido, así que lo pago ayudando a un tercero».
En cambio la Reputación Gratificante es cuando «ayudar a los demás es impulsado por una acción estratégica y la construcción de una reputación intencionada«. Este tipo de «ayuda» en particular es muy efectiva cuando se realiza constantemente pero en contra si se deja de realizar se produce la llamada dinámica del «¿Que has hecho por mi últimamente?.
Los autores de la investigación sugieren que las empresas realicen «BrainStormings» regulares para hacer cumplir las normas de pedir y ofrecer ayuda. Deben de ser regulares debido a la dinámica del «¿Que has hecho por mi últimamente?». También se debe fomentar el uso de la gratitud como herramienta como hace la empresa Southwest Airlines con el «agente del mes», o como la empresa internacional ConocoPhillips que tiene comunidades de intercambio de conocimientos en línea donde los miembros publican problemas empresariales y otros ofrecen soluciones.
Desde 2004, esta empresa en particular ha ahorrado mas de 100 millones con este sistema con la simple idea de que en las situaciones favorables y con un poco de apoyo, la gente realmente esta dispuesta a ayudar a otros.
Fuente: Revista Harvard Business Review
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